Bodega Contador

Benjamin Romeo y su Bodega Contador se han convertido en una auténtica leyenda, con sus vinos calificados dos veces con 100/100 por Parker. Tras finalizar sus estudios de enología, Benjamin Romeo decidió especializarse en Burdeos. Pronto fue llamado a su tierra natal por la ya legendaria bodega Artadi, donde trabajó de 1986 a 2000. El resto es historia, ya que Benjamin creó los vinos El Pisón y Pagos Viejos y llevó a Artadi a las alturas que ha alcanzado.

Al mismo tiempo, en 1996, comenzó a elaborar vino en el garaje de su padre y a criar su propio vino en la cueva excavada en la falda de la montaña (bajo la iglesia fortificada de San Vicente de la Sonsierra). En 2001, decidió dar el nombre de Bodega Contador al que pronto se convertiría en su mejor vino y el que le llevaría a lo más alto del mundo, calificado dos veces 100/100 por Robert Parker en 2004 y 2005. Las viñas están situadas en la comarca de la Sonsierra, alrededor de San Vicente, en algunos de los mejores terruños de toda la denominación. La Sierra Cantabria protege San Vicente de la Sonsierra de los vientos húmedos y fríos y de su parte de lluvia procedente del Atlántico. En este espléndido terreno protegido, las viñas de Benjamín Romeo se reparten en 80 pequeñas parcelas diferentes, todas ellas podadas en vaso. Algunas de estas mágicas parcelas están reservadas exclusivamente para el legendario vino de la Bodega Contador, como El Bombón, El Bosque, La Isla, El Sauco y otras.

En las mezclas creadas por Benjamín, encontramos (dependiendo del vino) principalmente uvas procedentes de suelos arcillo-calcáreos, pero también de gravas "aluviales", aluviales-calcáreos y arenosos.
En las mezclas predomina el tempranillo, con algo de garnacha tinta y a veces incluso un 1% de viura (variedad de uva blanca) en el caso del Predicador. Los blancos son principalmente viura, garnacha blanca y malvasía. Los vinos de Benjamin Romeo son todos extraordinarios, llenos de finura, mineralidad, sutileza y elegancia. Vinos elegantes y grandiosos.