Château d'Anglès - La Clape Classique 2016

Bettane & Desseauve

Sobre el bodega :

Éric Fabre no es ningún novato: comenzó su carrera en Médoc, donde fue director técnico de Lafite-Rothschild durante ocho años. En 2001, se instaló en el Mediterráneo con su esposa Christine y, más tarde, con su hijo Vianney, en el macizo de La Clape, un territorio ya cultivado por los romanos y bañado por el sol 300 días al año. Las uvas se cosechan a mano, se seleccionan minuciosamente y toda la producción se embotella en la finca. Aquí se producen tintos potentes, pero la especialidad del château son sin duda los blancos, uno de los vinos más originales del Languedoc, con predominio de la variedad Bourboulenc.

Guide Hachette des vins

Acerca del vino:

En nariz, aromas de laurel, romero, eucalipto y mermelada de frutos rojos; en boca, un perfil cálido y denso, con taninos firmes que lo sostienen.

Sobre el bodega :

Tras una larga carrera como director técnico en Château Lafite-Rothschild, en Médoc, Éric Fabre se instaló en La Clape. Se trata de un terruño que ya estaba cubierto de viñedos en la época de Julio César y que él se esfuerza por valorizar desde 2002. El viñedo tiene una superficie de 42 hectáreas.

Robert Parker - Wine Advocate

Acerca del vino:

Otro valor seguro del sur de Francia es el Languedoc La Clape Classique 2016, procedente de la finca de un antiguo viticultor del Château Lafite-Rothschild. El coupage es 40 % garnacha, 40 % syrah y 20 % monastrell, criado en cubas de hormigón durante 18 meses. Es un vino con cuerpo, concentrado y de textura aterciopelada, con intensos matices de arándano, cereza negra y ciruela.