Château de la Selve

En 2002, Benoît Chazallon, recién graduado de la escuela vitícola de Beaune, se hizo cargo del viñedo familiar y emprendió su reestructuración, con «la ambición diaria de elaborar vinos vivos, de gran finura y frescura, pura expresión de nuestros terruños». El entorno natural del lugar, una auténtica joya, revela un gran potencial para la producción de vino, con sol, noches frescas, paisajes salvajes, suelos calcáreos, garriga, humus, trufas... Para que el terruño pueda expresarse, Benoit Chazallon considera obvio que hay que preservar la vida en los suelos, lo que requiere trabajar las viñas con agricultura ecológica y biodinámica desde 2002. Un trabajo que dará sus frutos, ya que en 2012 será galardonado con el premio Descubrimiento del año en los Trofeos del Vino organizados por la Revue des Vins de France, que cada año premia a los profesionales del sector.

El Château de la Selve produce en 38 hectáreas de viñedos, con la denominación IGP Coteaux de l'Ardèche, cinco variedades diferentes: en tintos, garnacha, cinsault, syrah y cabernet sauvignon; en blancos, viognier. Se presta especial atención al equilibrio y la vida de los suelos para dejar expresar el concepto de terruño, y una selección de rendimientos controlados entre 25 y 45 hectolitros por hectárea permite una mayor concentración de los vinos.