Cheverny

Cheverny o el elixir de los reyes

El Cheverny, uno de los símbolos de la Turena, a menudo denominado el viñedo de los castillos del Loira, se extiende sobre una superficie de 550 hectáreas repartidas en 24 municipios del departamento de Loira y Cher. Si bien hoy en día es uno de los vinos más baratos de la carta, en otros tiempos era imprescindible en los banquetes reales y principescos. ¡Esbozo de un vino tan francés!

Cheverny: una variedad de uvas muy compleja:

El río Loira, una vía navegable muy transitada, permitía antiguamente a los habitantes de esta región acceder fácilmente a plantas que a veces procedían de muy lejos. Hoy en día, la tradición perdura y los viticultores de esta denominación siguen utilizando una amplia gama de variedades de uva. Así, el vino Cheverny siempre es el resultado de un ensamblaje.

Variedades de uva del vino blanco Cheverny:

Históricamente, citaremos las tres variedades de uva siguientes: • Romorantin: variedad originaria de Borgoña, importada de Beaune por Francisco I. • Menu Pineau, conocida localmente como Arbois. Similar a la Chenin. • Meslier, que proporciona una base perfecta para los espumosos. Variedades de uva de las mezclas contemporáneas: • Chardonnay: elegancia. • Sauvignon: fuerte expresión aromática. • Chenin.

Variedades de uva del vino tinto Cheverny:

• Gamay: frescura y redondez. • Pinot noir, originario de Borgoña: finura y sutileza. Son la base del ensamblaje. En variedades complementarias: • Cabernet franc y sauvignon, muy presentes en Burdeos. • Côt, originario de Cahors. • Pineau d'Aunis o Chenin noir, la variedad más antigua del Loira

Cheverny: terruño y clima

Los suelos son arcilloso-silíceos, sobre un fondo de caliza de Beauce. Las temperaturas son moderadas, con primaveras y veranos suaves, mientras que los otoños son frescos y húmedos. Por lo tanto, las uvas no se sobremaduran en ningún caso. Para contrarrestar estas condiciones, las variedades de uva se seleccionan por su alto valor aromático.

Vino Cheverny: de la viña a la bodega

Cultivo de la vid:

Las etapas del mantenimiento de la vid son, en principio, comunes a todas las denominaciones, pero su intensidad varía en función de cada una. • Control de la cantidad y la calidad de las uvas futuras. Cortar las ramas de la vid a una altura determinada. Eliminar algunos brotes. • Optimizar la exposición al sol y la ventilación de los racimos cortando la parte superior de la vid: se trata del recorte y, en verano, del deshojado: eliminar parte de las hojas que rodean los racimos. • La vendimia manual o mecánica.

Cheverny: en el corazón de la bodega

Las uvas blancas se colocan en una prensa para extraer el jugo. El azúcar que contienen se transforma en alcohol, liberando dióxido de carbono. Este es el proceso de fermentación alcohólica. El jugo de uva fermentado es el Bernache, muy apreciado. Las uvas tintas se introducen directamente en cubas. A continuación se produce una fermentación alcohólica y luego una transformación del ácido málico en ácido láctico, con lo que disminuye la acidez del vino: es la fermentación maloláctica. Para el vino rosado, las uvas tintas se introducen en la prensa, como se ha visto anteriormente con las uvas blancas. Una vez superadas estas etapas, se procede a la crianza en barricas o cubas: ¡de un simple zumo nacerá un auténtico Cheverny para degustar durante el año! Seco y afrutado para el vino blanco Cheverny, que acompaña a pescados y quesos de cabra. Las características son idénticas para los rosados, que acompañan a pescados y parrilladas. Los tintos, ligeros, afrutados y especiados, acompañan a carnes blancas o parrilladas. El vino de Cheverny, clasificado como AOC desde 1993, es el único VDQS (vino delimitado de calidad superior) que produce un vino espumoso con denominación.