Mas Amiel - Maury Millésime 1999 (vin doux oxydatif)

Bettane & Desseauve

Acerca del vino:

Más sedoso al tacto que el de 30 años, más elegante, acariciador, en sus aromas es casi salado, con notas de soja, y también matices de aguardiente y mermelada de higos. Una amplia paleta. Un festival interminable en el final de boca.

Sobre el bodega :

En Maury, la finca Amiel cuenta con 150 hectáreas de viñedos en producción, repartidas en 132 parcelas, dominadas por el castillo cátaro de Quéribus. Olivier Decelle (también propietario del castillo Jean Faure en Saint-Émilion) ha actuado como mecenas, poniéndolo poco a poco en perfecto estado de producción, con la ayuda desde 2007 de Nicolas Raffy, amante de estas tierras. Con la conversión a la biodinámica, la expresión de los vinos sin duda seguirá evolucionando en los próximos años. Si bien los vinos dulces naturales no han sido abandonados, ni mucho menos, se ha puesto el acento en la producción de vinos secos muy modernos, con una amplia gama que abarca todos los estilos. ¡Una fuente ineludible!

Robert Parker - Wine Advocate

RVF - La Revue du Vin de France / Guide des Meilleurs Vins de France

Sobre el bodega :

En el corazón de la región de Maury, al pie de la colina, se encuentra una gran construcción y hileras de barricas en las que los néctares envejecen un año al sol, antes de pasar a la sala de barricas durante décadas. Mas Amiel, el primogénito de la galaxia Olivier Decelle, es una página de la historia del Rosellón. Una finca que celebra la tradición de los grandes vinos dulces naturales, al tiempo que se renueva con vinos secos, con un estilo depurado, sanguíneo y muy preciso, impulsado por un patrimonio de viñas viejas. Nicolas Raffy, un talentoso viticultor catalán, defiende con orgullo los vinos de calcoschistos, margas negras y granito. Ha identificado parcelas escarpadas, adaptado sus mezclas, sus crianzas y sus fechas de vendimia para que los Maury secos se unan a los VDN, en la cima. La finca es hoy, sin duda, una de las grandes referencias. Desde hace unos años, los avances en los vinos secos son espectaculares. La tercera estrella se acerca.

Jancis Robinson

Acerca del vino:

Se parece al zumo de ciruela pasa. Huele a té de regaliz, anís ahumado y semillas de lino. Sorprendentemente ahumado y carnoso. Ciruelas pasas. Concentración asombrosa: da la impresión de que el vino ha sido extraído del corazón de la tierra. Hay tantas cosas aquí que es imposible hacer justicia a este vino en una cata rápida. Este vino requiere horas de tiempo y atención. Es una escultura imponente. Para comprenderlo, hay que sentarse con él, escucharlo, darle la oportunidad de contar su historia.

James Suckling