Graves

La AOC Graves, que data de 1937, se extiende a lo largo de la orilla izquierda del Garona, al sur de Burdeos, en una franja de 50 km. Todo el viñedo de Graves, desde Burdeos hasta Langon, puede producir vinos con la denominación Graves, pero la mayor parte de los vinos de Graves proceden de la zona que se extiende entre La Brède y Langon, rodeando las denominaciones Barsac y Sauternes. Los terrenos están formados por aluviones del Cuaternario traídos por el río. Esta capa de guijarros y piedras descansa sobre un sustrato arenoso, incluso sobre arena pura o alios (concreción ferrosa de arena), de la que la vid extrae los nutrientes necesarios para la elaboración de grandes vinos.

El terruño de los vinos de Graves presenta un microclima ideal para la vid. Está protegido de las inclemencias del tiempo por un espeso bosque de pinos, mientras que el río modera los excesos del verano.La superficie plantada con variedades tintas, en constante aumento desde los años 50. La denominación Graves se extiende sobre más de 3800 hectáreas. Su producción anual asciende a 170 000 hectolitros, de los cuales 2/3 son vinos tintos de Graves. El tercio restante se reparte entre los vinos Graves blancos secos (32 000 hectolitros) y los vinos Graves Supérieurs (11 000 hectolitros).

Los vinos tintos de Graves se benefician de una variedad equilibrada, en la que el Cabernet aporta aroma y estructura y el Merlot, perfume y suavidad. Según las añadas y las propiedades, alcanzan su apogeo entre los 5 y los 10 años. Los vinos blancos secos de la denominación Graves son elegantes y con cuerpo. Elaborados con Sémillon, desarrollan notas de cera y miel, así como una untuosidad natural que no excluye la frescura. Mezclados con Sauvignon, conocido por su vivacidad y expresividad, los vinos blancos de Graves resaltan aromas cítricos, a veces acompañados de notas exóticas o mentoladas. Su crianza en barrica les permite ganar en riqueza y complejidad tras unos años de envejecimiento. Los Graves Supérieurs son vinos blancos dulces con un bouquet pronunciado y muy largo en boca. De color amarillo dorado, se caracterizan por una armonía entre la acidez y el dulzor y desarrollan notas aromáticas tostadas, de miel y, en ocasiones, de frutos secos. Entre los numerosos crus de Graves, cabe destacar el Château Respide-Médeville y el Château Méjean.