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Gigondas

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A partir del siglo XII, las órdenes religiosas presidieron la expansión de la viticultura en Gigondas. La denominación de origen controlada Gigondas es una de las seis denominaciones locales del sur de Côtes-du-Rhône, reconocida por decreto en 1971. Su zona de producción, de unas 1.200 hectáreas, se sitúa en el municipio de Gigondas, en el Vaucluse, magnífico pueblo que se aferra a las laderas de las Dentelles de Montmirail al este y domina el valle del Ouvèze al oeste.

La denominación de Gigondas disfruta de un clima estrictamente mediterráneo, con variaciones más frescas en función de la altitud: el viento mistral limpia los viñedos, las precipitaciones son muy estacionales y las temperaturas son muy cálidas en verano. La topografía de la zona de Gigondas presenta suelos pedregosos en las antiguas terrazas de Ouvèze, así como suelos arenosos sobre molasas y coluviones calcáreos sobre margas en las laderas de las Dentelles de Montmirail. El terruño es magníficamente explotado por fincas como Domaine des Pallières, Maison M. Chapoutier, Domaine des Bosquets, Domaine Tardieu Laurent, Maison Perrin et Fils y la siempre popular E. Guigal.

Los vinos de Gigondas se elaboran a partir de Garnacha negra (limitada al 80%), Syrah y Mourvèdre (con un mínimo del 15%), con rendimientos limitados a 34 hectolitros por hectárea. La denominación produce vinos tintos profundos, equilibrados y con cuerpo, así como rosados embriagadores, generosos y de color intenso, con aromas característicos de almendra y fruta compotada.

Gigondas: presentación y características

Gigondas es un vino de denominación de origen controlada (AOC) producido exclusivamente en el municipio del mismo nombre. Gigondas es un típico pueblo de altitud media del Vaucluse. Los viñedos, enclavados en el corazón de las Dentelles de Montmirail, ofrecen unas vistas magníficas. Los viñedos de Gigondas ocupan 1.200 hectáreas. El terruño se beneficia de un clima mediterráneo cálido y seco y de frecuentes vientos de mistral. El suelo en el que crecen las vides, calcáreo por un lado y arenoso-arcilloso con guijarros por el otro, confiere a los vinos de Gigondas un verdadero potencial. Los vinos tintos representan el 98% de la producción, los rosados el 2%. La principal variedad de uva utilizada tanto para los vinos tintos como para los rosados es la garnacha negra. Su proporción, que no suele superar el 50%, puede llegar al 80%, según las denominaciones. También se utilizan Syrah y Mourvèdre, dos variedades de uva habituales en esta región.

Por lo demás, se acepta una tolerancia máxima del 10% de otra variedad de uva específica de los Côtes du Rhône, a excepción de la cariñena. La garnacha, perfectamente adaptada al clima local, confiere a este vino su carácter único. A veces se hacen comparaciones entre Gigondas y Châteauneuf-du-Pape, que geográficamente está muy cerca. Sin embargo, Gigondas tiene su propio carácter distintivo, y algunas añadas excepcionales son más asequibles que Châteauneuf-du-Pape.

Degustación y conservación de Gigondas

Al catar Gigondas, como con cualquier otro vino, se analizan los tres puntos siguientes: visual, olfativo y gustativo.

El ojo, o la vista :

- El tinto tiene un color rojo granate intenso. Recuerda a la tinta, con matices violáceos. Con la madurez, el tinto puede adquirir una agradable tonalidad teja. El vino es denso y concentrado,

- El rosado tiene el mismo tono granate intenso.

Nariz:

- Vino tinto: la primera nariz aporta notas afrutadas de frutos rojos. La segunda nariz evoca aromas de café, cacao y regaliz. En los vinos más viejos aparecen matices animales,

- Vino rosado: los aromas de frutos rojos, con notas de avellana y almendra tostada, revelan la originalidad de estos vinos.

Boca:

- Tinto: los vinos jóvenes son potentes y particularmente corpulentos. Su fuerza y robustez harán las delicias de los amantes de los taninos. Los vinos de larga crianza ganan en suavidad,

- Rosados: Más bien embriagadores y elegantes, ofrecen una buena estructura y profundidad en el paladar, lo que les confiere una frescura innegable.

Maridaje :

- El vino tinto combina perfectamente con carnes en salsa como los guisos a la provenzal, platos de caza, quesos de pasta azul o semicurados (St Marcellin, St Félicien, etc.),

- Rosé combina de maravilla con aperitivos, ya sean a base de verduras o que contengan marisco. Sírvalo con bullabesa, bourride o pasta carbonara.

Para sacar lo mejor del tinto Gigondas, que tiene mucho cuerpo y es tánico, se recomienda encarecidamente conservarlo durante algún tiempo. De hecho, su fuerza, unida a su grado alcohólico bastante elevado, permite conservarlo bien, a pesar de su acidez más bien limitada.

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