Limoux

En 1531, los monjes de la abadía benedictina de Saint-Hilaire, cerca de Limoux, elaboraban en su bodega un vino blanco poco habitual que fermentaba de forma natural en sus botellas de vidrio tapadas con corcho. Limoux es el origen del primer vino espumoso del mundo. La AOC Limoux produce vinos tranquilos y espumosos, entre los que probablemente el más conocido sea el Blanquette de Limoux.

Delimitada desde 1929, la zona de producción del vino Limoux fue la primera en dar lugar a una Denominación de Origen Controlada en Languedoc con la Blanquette de Limoux y la Blanquette Méthode Ancestrale (decretos del 18 de febrero de 1938) y una de las primeras denominaciones de Francia. La producción de vinos blancos «tranquilos» fue reconocida a su vez por el decreto del 21 de febrero de 1959, modificado el 29 de julio de 1993 en lo que respecta a las variedades de uva (mauzac 15 % mínimo, chardonnay y chenin) y a la vinificación, que debe realizarse obligatoriamente en barricas de roble. El decreto del 21 de agosto de 1990 añade una nueva denominación, el Crémant de Limoux. Por último, más recientemente, la denominación Limoux rouge fue reconocida por el decreto del 23 de junio de 2004.

El viñedo de Limoux cubre una superficie de 7800 hectáreas, de las cuales 2000 pertenecen a la Denominación de Origen Controlada, repartidas en 41 municipios agrupados en 4 terruños no jerarquizados, definidos simplemente en función de su climatología: el terruño de Autan, el terruño mediterráneo, el terruño oceánico y el terruño del Alto Valle.